2 de enero de 2015

Parece mentira que este aquí, otra noche , cualquiera no muy especial, y me he acordado de ti.
Terriblemente me han invadido los recuerdos, o los pocos que me quedan , difuminados entre canciones y peliculas, fotografias... ¿Sabes lo duro que es ver un momento de feliz congelado? Que nunca volverá a pasar. Supongo que no lo has pensado, o que no has vuelto a vernos, juntos sonriendo, o no has vuelto a escuchar nuestra canción , yo ni me he atrevido a ver esa película.
No entiendo porque pienso en ti si realmente estoy feliz con quien estoy ahora, y tú, parece que también. Nunca quieres saber de mi. Siempre intentas ser educado y gracioso, nunca cercano.
Escribo esto para ti, para que un día, si es así, cuando lo leas te des cuenta que si me importó. Me importas. Incluso me duele pensar en ti. No sabes lo duro que fue para mí, pero ya sabes como soy...
No puedo estar sola. No suelo esperar a nadie, y menos si tengo que culparme a mí por ello.
Nunca tuviste la culpa de nada, eras perfecto. Y yo... Soy yo, no hay mucho más, pero quizá lo que pasó fue por algo. Se que te depara algo mejor que yo (no mucho) pero si.
No sabes lo que me he llegado a odiar pensando en ti.
Mi vida amorosa son escombros y reescombros.
Y tu eres uno grande, muy grande. Y decíamos que había muy pocas casualidades de que no nos casáramos ¿sabes? y que a los 19 volveríamos, de hecho elegimos los nombres de nuestros hijos, y ahora ni me diriges la palabra y... Muero por dentro.
Supongo que me lo merezco.
Te echo de menos, y te quiero.
Sinceramente fortachón.

No hay comentarios:

Publicar un comentario