23 de septiembre de 2012

ForeverYoung

Sales un día queriéndote comer el mundo. Vuelves a casa con las zapatillas llenas de recuerdos y esa misma noche vuelves a salir con unos tacones que no sostienen esa sonrisa forzada que es inevitable tener. Finjes. En la vida , finjes, para superar tus problemas , para pasar página y para perder de vista a esa suerte que como bien sabes hoy no te acompaña. Lo malo , es que no puede mentir a todo el mundo , a ti mismo , no. Y una pequeñita parte de ti te dice , no le quieres , le amas con locura. ¿Y que sabré yo de amar? Contestas a esa mínima aparte que nunca más harás caso. Porque una vez te hizo dudar , bueno... Una vez tras otra , esa pequeña parte de ti, es tu corazón , el que te hace sufrir el que te hace sentir. Siempre te dice , que te arriesgues que pierdas el miedo , que vale la pena. Pero luego esa parte es la primera que luego rompen. No lo entiendo la verdad, dicen que vale la pena, pero...¿Hasta que punto? Ya no me creo anda de lo que sienta la verdad. Solo quiero buscar y no dejar que me encuentren una vez más. Porque esta vez me he escondido de cualquier huella o más bien cicatriz que me dejaste. Ahora no estoy sin ti , peor tampoco contigo. Ahora soy simplemente mi mente y yo, y bueno ese dolor de estomago que aparece cuando ni me miras al pasar. Solo me necesito a mi y a nadie más. Porque se que tú no vas a estar ahí siempre , ni nunca.
Ahora dejame decirte que no me sonrias tampoco por favor, ya perdí al cabeza una vez, no estoy para perderla más veces.

No hay comentarios:

Publicar un comentario